La ría de Bilbao

Bilbao Tursimo. Palacio Euskalduna
La ciudad de Bilbao, en la costa cantábrica Euskalduna, acometió a finales del siglo pasado una valiente renovación urbana. Los espacios en torno a su ría, que en un tiempo dieron sentido a su existencia y a su glorioso pasado industrial, obsoletos ya, se habían transformado en inhóspitos lugares que impedían caminar a la ciudad hacia su futuro como metrópoli de servicios.Se pusieron en marcha entonces multitud de ambiciosos proyectos, de los que la estrella sería, naturalmente, el Museo Guggenheim de Frank Gehry, pero que incluirían también, no solo importantes obras de arquitectos de fama mundial como Isozaki, Moneo, Siza, Calatrava o Foster, sino innumerables intervenciones de los más jóvenes y brillantes arquitectos españoles.
El resultado es que en pocos lugares de la vieja Europa, es posible disfrutar de una concentración tal de magníficas obras arquitectónicas. Si a eso añadimos, que a escasos cien kilómetros por autopista se encuentra la bellísima ciudad de San Sebastián, y en ella, enmarcando su espléndida bahía, la plaza de El Peine de los Vientos de Eduardo Chillida y el magnífico Palacio de Congresos y Auditorio Kursaal de Rafael Moneo, nos encontramos con un inolvidable petit tour, capaz de saciar los más sofisticados apetitos arquitectónicos.